En algunas ocasiones se confunde la fascitis plantar con el espolón calcáneo. Cuando en las pruebas radiológicas observamos una calcificación en la parte postero-interno del talon entonces hablamos de espolón calcáneo.
No obstante, los síntomas y el tratamiento van a ser muy parecidos. El espolón aparece por mantener una tracción continuada de la fascia contra el calcáneo. Esa tensión provoca en la fase inicial la fascitis plantar, y si es mantenida en el tiempo posiblemente generará el espolón calcáneo. En ambos casos, el objetivo del tratamiento será “destensar” la fascia para que disminuya la inflamación y, por lo tanto, el dolor.